La talabartería fue fundada en los años 16 a principios del siglo XX en Medellín, cuando Don Castor Arango teniendo un almacén de artículos e insumos para el campo, vio la oportunidad de crear su propia talabartería para satisfacer una gran demanda, para esa época.
A mediados de los 80`s los hijos de Don Castor Arango venden la talabartería y pasa a llamarse “Talabartería Guillermo Londoño”, sin embargo esta continuó con los mismos talabarteros, ya que tenían una basta experiencia y eran clave principal para entregar un producto con la excelente calidad que siempre ha caracterizado a la marca.
Actualmente la empresa cuenta con un portafolio de productos mucho más amplio ya que ofrece sillas y artículos no solo para vaquería, si no para todas las actividades ecuestres. Esta sigue conservando la técnica original con la que se trabajó desde su inicio, pues el producto ofrecido es hecho totalmente a mano y con materias primas rigurosamente seleccionadas.
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